El año más largo de la historia llega a su fin. Un año duro, intenso y que nos ha hecho cambiar como personas y sociedad en todos los ámbitos de nuestra vida.
Para muchos, acabar el año es una necesidad, algo que debe llegar ya. Lo entendemos pero, si algo bueno tienen los problemas, son los aprendizajes. Hemos entendido el valor de las cosas que queremos, lo que debemos proteger: familia, amigos, salud, solidaridad, negocios...
Recordemos el año 2020 como el año que nos puso a prueba y nos hizo evolucionar, el año en que nos dimos cuenta de las cosas que de verdad importan. Que el último grano de uva sea el acto de celebrar y abrazar para siempre lo mejor del 2020: lo que aprendimos de él.
Conoce las historias de estas personas y descubre qué es lo que han aprendido de este duro año.
Cuéntanos que es lo que has aprendido este 2020 y qué es lo que no quieres olvidar de él. Las guardaremos para siempre.
Tu historia ayudará a que muchas personas vean la vida de otro color.
Nuestra uva es el claro ejemplo de que de cualquier problema puede surgir un aprendizaje y que proteger lo que queremos, puede hacernos únicos.
¿Sabéis por qué protegemos nuestra uva con un bolso?
D. Manuel Bonmatí Abad, en el 1919, luchaba contra la plaga de la polilla. Por lo tanto, decidió proteger la uva con un bolso de papel para protegerla del insecto. ¡Y vualá! problema solucionado.
Pero aquí no acaba todo, y es que, gracias al bolso la uva comenzó a adquirir propiedades y características únicas, las que hacen que nuestra uva tenga ahora el sello de Denominación de Origen. Propiedades que ya sabéis: un mayor sabor y textura, grano y color uniforme y piel fina y pepitas pequeñas..